Enfermedades importantes transmitidas por parásitos

Enfermedades transmitidas por garrapatas

Las garrapatas se alimentan de la sangre del huésped y, en infestaciones severas, pueden provocar anemia. También son un importante vector de enfermedades graves, que se transmiten por su picadura, y algunas también pueden transmitirse a los humanos. El control de los parásitos de garrapatas en los perros es una responsabilidad muy importante, ya que se considera un problema de salud pública.

Estas son algunas de las enfermedades más importantes que pueden transmitir:

1. Enfermedad de Lyme (Borreliosis)

Causada por la bacteria Borrelia burgdorferi.
Transmitida por garrapatas del género Ixodes.
Síntomas: fiebre, pérdida de apetito, letargo, artritis, dolores musculares, meningitis, enfermedad renal.

2. Rickettsiosis

Causada por la bacteria Rickettsia conorii.
Transmitida por la garrapata Rhipicephalus sanguineus.
Síntomas: fiebre, dolores musculares, pérdida de apetito, inflamación de los ganglios linfáticos, vómitos , diarrea, problemas respiratorios.

3. Enfermedad de Ehrlichia (Ehrlichiosis)

Causada por la bacteria Ehrlichia canis.
Transmitida por garrapatas del género Rhipicephalus spp..
Síntomas: fiebre, ganglios linfáticos inflamados, dificultad respiratoria, pérdida de peso, trastornos hemorrágicos.

4. Babesiosis

Causada por el protozoo Babesia canis.
Transmitida por la garrapata Dermacentor spp.
Síntomas: fiebre, pérdida de apetito, ictericia, anemia, colapso cardiovascular.

5. Anaplasmosis

Causada por las bacterias Anaplasma phagocytophilum y Anaplasma platys.
Transmitida por garrapatas de diferentes especies.
Síntomas: fiebre, depresión, anorexia, poliartritis, hemorragia.

Leishmaniosis

La leishmaniosis es una enfermedad grave que puede afectar a perros y otros mamíferos, incluidos los humanos; está causada por un parásito llamado Leishmania. Las infecciones por Leishmania spp. y más concretamente por L. infantum suelen transmitirse por especies específicas de «insectos vectores» pertenecientes al grupo de los flebótomos. Los flebótomos son insectos nocturnos, y sólo están activos desde el atardecer hasta las primeras horas de la noche y al amanecer. En los climas templados, los flebótomos son activos de abril a noviembre en el hemisferio norte, mientras que en los países tropicales pueden encontrarse durante todo el año.

La leishmaniosis sigue siendo una zoonosis importante, sobre todo en Sudamérica y la cuenca mediterránea, así como en África oriental. Se sigue pensando que los perros son un reservorio predominante, aunque se han encontrado otros animales de compañía, incluidos gatos y caballos, con infección clínicamente significativa.

La transmisión se produce cuando un flebótomo portador del parásito pica a un perro. El perro se infecta y se convierte en huésped del parásito. Cuando otro flebótomo pique a este perro infectado, ingerirá el parásito con la sangre y lo transportará hasta que pique a otro perro, transmitiendo el parásito una vez más.

No todos los perros infectados desarrollarán la enfermedad, algunos permanecerán asintomáticos y otros la padecerán con diferentes grados de gravedad. Los signos clínicos son muy variables en función de la respuesta inmunitaria del animal.

Signos clínicos

Los síntomas de la leishmaniosis en perros pueden variar en función de la gravedad de la infección y de la respuesta del sistema inmunitario del animal.

Los síntomas más comunes son:

  • Pérdida de peso y pérdida de apetito
  • Fiebre
  • Depresión
  • Anemia
  • Enfermeded renal y hepática
  • Problemas de piel
  • Artritis y dolor articular
  • Problemas oculares, como conjuntivitis y keratitis

Prevención

La prevención de la leishmaniosis en perros es crucial, sobre todo en regiones donde la enfermedad es frecuente.

Entre las medidas de prevención se incluyen:

  • Uso de productos antiparasitarios repelentes
  • Evitar la exposición al mosquito flebótomo
  • Vacunación